Un destructor como Vladímir Putin sólo será recordado por la humanidad como un criminal de guerra, igual o peor que Hitler y otros dictadores criminales que sólo piensan acumular más poder en provecho propio, arrasando y desmenbrando la mente humana por más de 500 mil generaciones, como afirma la Teoría de la Unión de los 5 Continentes.

Lo más triste y penoso del pueblo ruso es haberse dejado someter a ser parte de un Estado lleno de barbarie y crueldad; de un invasor, como hizo Hitler al pueblo alemán, y aun extendiendo y creando miles de campos de concentración en varios países de Europa para el exterminio de la raza humana. Por eso, Putin perdió el camino de ser el líder de una nación rusa; porque un bárbaro nunca debe considerarse un líder debido a que toma el camino equivocado. Putin sólo irá arrinconándose y despojándose del pueblo ruso, porque llegará un día en que la Corte Internacional de Justicia lo sentencie como criminal de guerra. Un salvaje como Putin, que jamás genera el emprendimiento individual y colectivo en la estructura social de la humanidad, solamente brinda una libertad de pensamiento totalmente mutilada.